IMPORTANCIA DE LA TORÁH ORAL
IMPORTANCIA DE LA TORÁH ORAL
Es común escuchar a personas y movimientos
religiosos que intentan acercarse al judaísmo, vilipendiar de los judíos por
que aceptamos como norma de vida la TORÁH ORAL. Consideran ellos, que la Toráh
Oral es solo un invento rabínico. Fundamentan
estos religiosos su errado razonamiento, en la pretensión de que solo lo
escrito es la norma o sendero que se debe seguir. Por ello es necesario saber
que Moshé Rabenu recibió la Toráh en Har Sinaí. Que la Toráh recibida por él,
está dividida en dos partes: Ley Escrita (Toráh Shebijtav) y, Ley Oral (Toráh
Shebealpe). Esta última que es el punto de nuestra disertación y la que nos
atañe, constituye la explicación de la primera con todos los detalles necesarios
para un mejor y adecuado conocimiento de las Mitzvot. Tal y como Las leyes
reglamentarias de un país vienen a regulan los detalles de algo que está
establecido en la Constitución Política del mismo.
¿Cuál es el origen de la Toráh
Oral?
Dado
a que su alcance es extenso, la Toráh Oral constituye un tema de mucha
importancia en la cosmovisión física y espiritual del judaísmo. Pues esta, nos
conecta y a la vez, regula cada detalle de la Toráh escrita. Por ello la Toráh
Oral incluye toda la recopilación de leyes y reglamentaciones denominadas
Mishná, junto con otras compilaciones aceptadas como discusiones y los debates
de dicho material al que se le denomina el Talmud o la Guemará; las historias y
sus lecciones, que aparecen compiladas en el Talmud y obras midráshicas.
En la introducción a su obra
Mishné Torá escribe Rambam:
“Todas las mitzvot le fueron dadas a
Moisés en el monte Sinaí, con su correspondiente significado, como está
escrito: “Y te doy las tablas de piedra, la Torá y la mitzvá; la Torá es la Ley
escrita y la mitzvá es la Ley oral”. Antes de su muerte Moisés puso por escrito
toda la Torá. Le dio un libro a cada una de las tribus, y otro libro fue puesto
en el Arca para todo tiempo… No puso por escrito la mitzvá, que es la
explicación de la Torá, pero la enseñó a los ancianos, a Iehoshúa y a todo
Israel”.
De allí inferimos, que la Toráh oral expresa la
riqueza inconmensurable de la Toráh escrita; formando una estructura monolita,
unitaria que se complementa mutuamente y que al ser interpretada forman un
organismo holístico. No obstante, podemos ver que la Toráh escrita alberga un
cúmulo de principios jurídicos que la Toráh oral comenta e interpreta
adecuadamente. Es claro el fundamento de la Toráh Oral, podemos leer en el
libro de Shemot 34:27 leemos:
“Y
dijo HaShem a Moshé escribe para ti estas cosas pues de acuerdo [a través de mi
boca] a estas cosas establecí mi pacto contigo y con Israel”
Aquí la expresión “de acuerdo” (ki a´l pe)
como leemos en hebreo, sería “a través de mi boca” y
es aquí precisamente en donde empezamos
a observar el dinamismo escrituristico de la TORAH ORAL.
La regulación en materia interpretativa de detalles que
hace la Toráh Oral, viene a iluminarnos resolviendo con ello, los pormenores de
la vida practica judía; aunque la solución se halle incluida en la Toráh escrita.
Es menester que sepamos, cuán importante es la Toráh Oral, su valor para la
adecuada y verdadera interpretación teórica de la Toráh escrita; ella viene a
ser el objeto conciliatorio de las antinomias que a menudo se presentan en la Toráh escrita,
ayudando e iluminando en la comprensión del texto. Razón por la cual, sin la
Toráh oral es imposible explicar o dar aplicabilidad a muchas prescripciones de
carácter sencillo pero, incompleto a las obligaciones religiosas cotidianas tales
como en este caso, las instrucciones para sacrificar una res.
“[…]
podrás faenar del ganado mayor y del ganado menor que HaShem te diera. De la
forma que HaShem te ordenó y podrás comer allí donde vivas, todo lo que desees.”
(Devarim 12: 21).
No obstante, se puede constatar que en ningún lugar
de la Toráh escrita se explica de forma precisa que parte del cuerpo del animal
se escoge para efectuar el sacrificio. Tampoco En ningún lugar de la Toráh
Escrita hay discusión acerca de este tema; muy a pesar de que el texto reitera
afirmando: “como te he mandado”. Es muy obvio, pues el precepto fue transmitido
en forma oral, y no por escrito.
Leemos también en la Toráh, en el Sefer Devarim 22: 13-29,
sobre una joven prometida y, que esta llega a trasgredir, no se le aplicará el
mismo castigo que se le aplicaría a una mujer que esté casada y trasgreda de la
misma manera que la no casada. Sin embargo, vemos que en ningún lugar de la
Toráh se definen con precisión que es un “compromiso” y qué es un “casamiento”
y la semántica de cada termino para su aplicabilidad. El alcance y significado
de estas dos palabras a las que alude la Toráh Escrita, fueron dados en la
Toráh Oral.
También sabemos por la Toráh Oral sobre los Arba´a
minim, las cuatro especies que en Sucot utilizamos y, sobre las que
pronunciamos bendiciones. Asimismo cuando leemos en el pasuk:
“y
átalas como señal en tu mano, y que
estén como símbolo [señal] entre tus ojos” (Devarim 6: 8)
Lo que nos indica que los Tefilím deben ser colocados
en el brazo y la cabeza. Aun así, no sabríamos qué es la “señal”, qué debemos
atar o en qué lugar del brazo o cabeza colocarlas. Todos estos preceptos no
podríamos llevarlos a la práctica diaria o en las festividades sin la
explicación de la Toráh Oral.
Un pensador jasídico expresó que la Toráh escrita es
una caja llena de velas o bujías que la Toráh oral viene a encender con su
propio fuego; las bujías y la llama se unen formando una sola TORÁH.
Cuando el pueblo hebreo recibió la Toráh Escrita, recibió
también la Toráh Oral con sus secretos. Los MIDOT o medidas que no
son otra cosa que las reglas lógicas para la interpretación de la Toráh escrita
y fueron fijadas por los maestros. Rabbí Hillel formuló siete; Rabbí Yishmael
formuló trece; y Rabbí Eliecer ben Yossi Ha Glili formuló treinta y dos. Pero,
no fueron descubiertos por ellos específicamente, sino que los conocían y
manejaban porque los habían aprendido de sus maestros, quienes a su vez la
recibieron de sus predecesores compilando un cúmulo de reglas lógicas que se
inscriben en la tradición.
En el Pirkéi Avot 1:1 dice:
משֶׁה קִבֵּל תּוֹרָה
מִסִּינַי וּמְסָרָהּ לִיהוֹשֻׁעַ, וִיהוֹשֻׁעַ לִזְקֵנִים, וּזְקֵנִים
לִנְבִיאִים, וּנְבִיאִים מְסָרוּהָ לְאַנְשֵׁי כְנֶסֶת הַגְּדוֹלָה. הֵם אָמְרוּ שְׁלשָׁה דְבָרִים, הֱווּ
מְתוּנִים בַּדִּין, וְהַעֲמִידוּ תַלְמִידִים הַרְבֵּה,
וַעֲשׂוּ סְיָג לַתּוֹרָה
“Moshé recibió la Toráh en el Sinaí y la transmitió
a Yehoshúa, éste a los Ancianos, los Ancianos a los Profetas y, éstos, la
legaron a los hombres de la Kenéset haguedolá. Ellos afirmaron tres principios:
sed circunspectos al admitir juicio, formad numerosos discípulos y haced un
cerco en torno de la Toráh.” El Tanaíta Rabbí Yehudá Hanasí comenzó esta Mishná
diciendo “Moshé recibió la Toráh de Sinaí” para hacernos saber que las
reglas de conducta que aparecen en este tratado no son fruto de la imaginación
prolífica de nuestros sabios, sino que también estas emanan de Sinaí. Por lo
tanto, todas las Mitzvot sin excepción alguna que fueron dadas a Moshé Rabenu en
Har Sinaí fueron dadas con su respectiva interpretación; pues está escrito:
“Y te daré las tablas de
piedra y la Toráh y la Mitzvá” (Shemot 24:12)
Aquí el término Toráh se refiere a la Toráh Escrita
y, el término Mitzvá se refiere significativamente a la interpretación
Toráh Oral.
La Toráh oral es el alma de la Toráh escrita, sin
ella la Toráh escrita quedaría como un cuerpo inerte, tal es el caso al leer
los siguientes textos en la Toráh: Shemot 20:10; Devarim 12:21-22; 24:1 con
solo leerlo no captamos el espíritu interpretativo de la Ley, pero, si ahora
comparamos estos textos de la Toráh escrita con algunas interpretaciones que el
profeta Yirmiahu hace en Yirmiahu 17: 21-22, que Nehemías 10:30-32 nos damos
cuenta como la Toráh escrita va adquiriendo corpus valorativo cuando es
comentada o interpretada y no con esto queremos decir que la Toráh oral le
reste importancia a la escrita, todo lo contrario, la realza, le da valor, la
completa y esta se ve realizada en ella.
El Talmud dice:
“Aquel que pretende no reconocer más que la Toráh
escrita, ni siquiera la conoce” (T.B Yevamot 109; b).
Aquí la
referencia textual de “reconocerla” es utilizar la Toráh
oral con su aplicabilidad. La razón por la cual hemos venido sosteniendo la
importancia de la Toráh oral es porque así nos lo revela la Toráh escrita y
evitar caer en la suerte de aquellos que han despreciado la Toráh oral
quedándose en el conformismo literal. Estos han corrido la mala suerte de
desaparecer; otros están diezmados y empobrecidos espiritualmente. Tal es el
caso de los samaritanos, saduceos y los caraítas. En el judaísmo rabínico y en
el pueblo de Israel la Toráh escrita subsiste gracias a la praxis que solo la
Toráh oral permite. Gracias a esto la Toráh es una TORÁH HAYIM, una Toráh de Vida.
Yehudah Abraham Dumetz Pinto